La marca

Dram Ive es una marca nacida en el Norte de Portugal, que combina sofisticación y responsabilidad medioambiental en la creación de accesorios de moda limitados y exclusivos. Surgimos para cubrir la necesidad de ofrecer productos de alta calidad, producidos localmente de forma sostenible y con bajo impacto ambiental.

Nuestra producción es íntegramente propia y destaca por su exclusividad. Cada colección depende directamente del excedente disponible, dando como resultado ediciones limitadas y piezas con historias únicas. Seguimos los principios de producción lenta, asegurando que cada artículo esté elaborado con mucho cuidado, cariño y por mano de obra altamente calificada.

Nuestros productos están diseñados para personas que valoran la diferenciación, la exclusividad y la versatilidad. Cada detalle está diseñado para garantizar la longevidad, con diseños y paletas de colores que permiten años de uso.

Creador

"Sólo me conozco de una manera. Soy un eterno entusiasta y apasionado por el arte de la creación.

Si me preguntas cómo entré en el mundo de la moda, no sé exactamente qué responder. Pero creo que la culpa es de estas dos personas que están a mi lado. Mi madre y la señora Prazeres, quien fue mi niñera durante mucho tiempo. Ambas son costureras de profesión. 

Mientras que mi madre era la persona creativa que constantemente inventaba cosas nuevas, la señora Prazeres era quien desarmaba y volvía a hacer la misma pieza una y otra vez hasta que quedaba perfecta. Ella no lo sabe, pero hace muchos años me “prestó” el “Gran Libro de la Costura”. Nunca lo he leído hasta el día de hoy, pero lo guardaré conmigo para siempre por todos los buenos recuerdos que me trae. 

Desde pequeña, inconscientemente intenté seguir sus pasos. Cogía telas, me apropiaba de sus cosas, desarmaba máquinas (…) sin ninguna noción de patrones ni de costura, para poder hacerme ropa. Me transmitieron su gusto y mi curiosidad por querer saber más y más, lo que hizo que hoy pueda crear sus piezas de forma totalmente independiente.

Tras finalizar mi formación en diseño de moda y debido a toda esta cercanía con el mundo textil a lo largo de los años, me di cuenta de que todavía había mucho desperdicio en las grandes industrias. Se desechaban enormes rollos de tela que sobraban, ya fuera porque eran restos de colecciones o porque presentaban pequeños defectos. 

Pensamientos como "se podrían hacer tantas cosas útiles con estos tejidos en lugar de desperdiciarlos" persistieron hasta el momento en que se creó Dram Ive. Sin ningún plan y sólo con mis enormes ganas de crear, lancé el primer tote bag, básico, pintado a mano. Lejos de imaginar que 3 años después la gama de productos, su calidad y la gente que los quería, era mucho mayor. 

Mi misión es y siempre será servir mejor a la comunidad de Dram Ive. Una comunidad llena de personas reales, que buscan una marca humanizada, productos limitados, de calidad y con un diseño diferenciado.

Es posible hacer moda de forma sostenible y ética, sin renunciar a la calidad y la diferenciación”.

Francisca Carvalho